Supervivientes: Sonia Monroy ingresada en el hospital
La final de Supervivientes todavía sigue reciente en la memoria de todos los espectadores al igual que la decepción que vivió Sonia Monroy en la gran final. Es natural, ella había luchado de verdad, había ganado pruebas de líder, pescaba y era independiente.
Pues bien, hoy, en el programa Qué tiempo tan feliz de María Teresa Campos hemos conocido una triste noticia y es que al parecer, Sonia Monroy ha sido ingresada en el hospital por tener piedras en el riñón. Según han explicado tal vez sea necesario operarle, sin embargo, quedamos a la espera de poder conocer más datos sobre el caso.
La verdad es que es una pena que esto haya sucedido justo ahora porque bastante dolor había sentido a nivel emocional ante lo que para ella fue una derrota como para que ahora, tenga que hacer frente a la enfermedad. En cualquier caso, Sonia Monroy ha mostrado ser una mujer fuerte y luchadora. De hecho, gracias a este concurso ha conseguido mostrar una imagen totalmente diferente de sí misma puesto que estábamos acostumbrados a verle en los platós de televisión con temas polémicos.
Supervivientes es un programa en el que los concursantes tienen que hacer un gran esfuerzo. Además, implica un cambio de vida extremo respecto a la vida habitual de cualquier persona que vive en la ciudad. Ahora mismo, Sonia Monroy necesita del cariño y del apoyo de todos los suyos.
Por el contrario, Rosa Benito en su madurez parece que ha rejuvenecido quince años. De hecho, ha bajado de una talla48 auna 38. Es decir, tiene un tipo que hacía años que había perdido. Pero también, el paso por la isla le sirvió a Rosa para reflexionar sobre su vida, para pensar en cómo quiere vivir a partir de ahora. La conclusión fue clara: toda su vida ha estado pensando en los demás y ahora quiere pensar más en sí misma, hacer planes, ir al cine, y disfrutar con sus amigos.
Rosa Benito y Sonia Monroy son la cara y la cruz de una misma moneda. Esperemos que Sonia se recupere pronto y que Rosa disfrute mucho de este momento.
Imagen: El rincón de Serchtik