Las apariencias engañan en más de una ocasión, las cosas no siempre son lo que parecen. Es importante tomar la iniciativa para conocer a las personas tal y como son porque las apariencias engañan en muchos casos.

Pero además, en una sociedad en la que la belleza física tiene tanto protagonismo es importante resaltar el valor de lo verdaderamente vital: la belleza interior. Encontrar un buen corazón en un buen amigo y en una buena persona es un regalo que no se agota nunca. En cambio, la belleza física en muchos casos no traspasa y se agota en sí misma.

¿Qué puedes hacer para ir más allá de las apariencias?

1. No te dejes influenciar por la opinión de terceros sobre una persona y anímate a conocer tú a ese alguien. Así podrás opinar con tu propia experiencia sobre cómo es esa persona contigo.

2. Trata a los demás como te gustaría que te traten a ti. A nadie le gusta que le encasillen en un rol determinado. Por tanto, dedica tiempo y atención para conocer de verdad a una persona.

3. Disfruta de la evolución que tienen las relaciones personales para sorprenderte de cómo puede cambiar una persona una vez que ya sabes cómo es. Es bonito poder analizar la evolución de un vínculo afectivo.

4. Asume que existen personas diferentes a ti, que tienen otra forma de pensar y de ver las cosas. Pero eso no significa que no puedas llevarte bien con ellas. De hecho, en el ámbito humano, la diferencia es una gran fuente de riqueza.

5. Todas las personas, incluso aquellas que no te caen bien, tienen virtudes. Intenta ver el lado bueno de los demás porque cuando pones el foco de atención en todo lo positivo te sientes mucho mejor contigo mismo.

6. Incluso en el caso de que una persona no te caiga bien, evita criticarle. Merece un respeto. No pierdas tu tiempo en energía negativa cuando en realidad, puedes dedicar tu atención a disfrutar de planes sociales con amigos verdaderos.

Las apariencias engañan, algunas verdades se muestran como un falso espejismo.