Bienestar físico y emocional
El bienestar en el ser humano es una realidad integral que remite a la dualidad propia del sujeto. Es decir, cuerpo y mente muestran dos caras de una misma moneda, la riqueza propia de la complejidad de lo humano. El bienestar físico y el emocional están directamente vinculados para bien y para mal. Es decir, en un momento de gozo por una buena noticia, también es más fácil sentirse bien a nivel físico. Imagina lo bien que te sientes al empezar el día con una llamada de teléfono de alguien a quien aprecias mucho. Sin embargo, en una situación de sufrimiento extremo, el cansancio físico también se siente más. En ese caso, tienes que cuidar de ti y centrarte en tu proceso de recuperación.
¿Cómo puedes potenciar tu bienestar emocional a través del bienestar físico?
1. En primer lugar, llevando una vida ordenada y con unos horarios marcados. Así puedes crear hábitos. Existen hábitos que no deben faltar en tu rutina diaria, como por ejemplo, ir a pasear por la ciudad a la mañana o a la tarde, en función de tus horarios de trabajo.
2. Disfruta de la Dieta Mediterránea, ten un menú equilibrado, anímate a disfrutar de nuevos sabores. Disfruta de la comida, es decir, comer es una necesidad pero también lo es, poder compartir una buena mesa con amigos y familiares en un día especial.
3. Haz deporte. De hecho, existen deportes que favorecen los valores de equipo, porque permiten compartir el éxito en común. Con la llegada del verano, existen deportes excelentes, como por ejemplo, la natación.
4. Puedes darte un buen masaje, ir al balneario, disfrutar de un baño caliente para tener más nivel de bienestar físico y emocional. Regálate unas vacaciones, marca límites al tiempo de trabajo, aprende a potenciar el ocio. Es decir, disfruta del cine, asiste a un concierto, visita un museo…
Quiérete y mímate. Hazte un regalo a ti mismo un día cualquiera. No tiene que ser tu cumpleaños para poder avanzar. ¿Qué haces tú para potenciar tu bienestar físico y emocional?
Imagen: Ofell