Aumenta el consumo de antidepresivos por la crisis
La crisis económica plantea una situación muy difícil para muchas personas desde un punto de vista emocional. No sólo se resiente el bolsillo al compás de la falta de trabajo, sino también, el estado de ánimo. Produce mucho dolor y sufrimiento vivir con la sensación de no saber qué pasará mañana o con la angustia de tener miedo de no hacer frente a los gastos de la hipoteca.
Ante este drama, conviene destacar que ha aumentado el consumo de depresivos con la crisis ya que además, la consulta al psicólogo o al psiquiatra se ha convertido en una necesidad emocional para muchos pacientes que necesitan tener una esperanza y un punto de apoyo para poder crecer y seguir adelante.
Está claro que el consumo de antidepresivos también crea dependencia. Es indispensable tener un tratamiento siempre que existe una causa y una necesidad para poder luchar y avanzar a nivel vital. Por tanto, se trata de un remedio terapéutico para tratar una causa.
Por otra parte, merece la pena aprender a potenciar los propios recursos internos, potenciar al máximo la fortaleza emocional, cultivar la alegría, poner ilusión en los pequeños detalles del día a día, reducir las puertas del miedo, desarrollar la libertad interior y tener fe en el futuro. ¿Cómo se logra esto que parece sencillo en la teoría pero es tan difícil en la práctica?
Aprendiendo a vivir: compartiendo la vida con los amigos y familiares, evitando el aislamiento, buscando trabajo de forma activa, eliminando gastos superficiales, teniendo capacidad de adaptación a los cambios, disfrutando de cada aprendizaje.
Aumenta el consumo de antidepresivos en la crisis y está claro que no se trata de una buena noticia ya que la vida a nivel emocional, no es sencilla en un entorno de hostilidad como el actual. Por ello, conviene aprender al mal tiempo buena cara para poder vivir con un buen nivel de bienestar y de felicidad. Por otra parte, destaca también el excelente trabajo de psicólogos y psiquiatras que apoyan a muchas personas que de verdad, lo necesitan.
Imagen: Día a día con la bipolaridad
Más información: El Mundo