Hoy se celebra el Día Internacional contra el uso indebido y el tráfico de drogas. Pues bien, también es una buena ocasión para prestar una atención especial a la salud, en relación con lo adecuado que es evitar cualquier sustancia tóxica. Las drogas producen efectos negativos a largo plazo, es decir, su destrucción no siempre resulta inmediata. Por ello, más allá de la euforia que puede producir el consumo de drogas en ciertos momentos, también produce mucho dolor, precisamente, porque toda subida tiene una caída.

Por otra parte, se debe informar desde la niñez sobre la importancia de tener unos hábitos de vida saludables para que al llegar a la adolescencia los jóvenes estén preparados para decir no a las tentaciones que se encuentran en el camino y tengan la personalidad suficiente para rechazar algo que no quieren. En la adolescencia también es muy importante evitar las malas compañías para apostar por los amigos de verdad y los entornos saludables.

Pero siempre conviene pensar en positivo y tener esperanza, es decir, por suerte, la adicción se puede superar. Por ello, aquel que ya ha caído víctima de esta adicción, puede pedir ayuda y también, iniciar un proceso de recuperación en manos del médico y por supuesto, contar con el apoyo de la familia y de los amigos más cercanos.

Los problemas de adicción a las drogas repercuten en muchos ámbitos de la vida. Por ello, también producen problemas laborales, conflictos con los amigos, soledad e incapacidad de seguir la rutina diaria. En esencia, la vida se convierte en una ruina emocional, el ser humano no es feliz, sin embargo, no sabe cómo salir de su situación porque la adicción es tal, precisamente, porque domina la voluntad y tiene mucha fuerza.

Sin embargo, la fuerza de superación de un ser humano es infinita para sobreponerse a cualquier obstáculo, por ello, siempre es posible ir más allá. De la droga se puede salir, pese a que el proceso sea largo, duro y muy costoso.

Mucha fuerza a todos aquellos que están pasando por ese proceso.

Imagen: Crónica