Existen personas que viajan mucho por cuestiones de trabajo. En el lado extremo de la balanza podemos pensar en las modelos que viajan de una ciudad a otra por motivos profesionales. Sin embargo, cualquier persona en una dimensión diferente puede tener que enfrentarse al yet lag en algún momento de su vida. ¿Cómo evitar las molestáis propias del cambio de horarios?

1. Ante el cambio de hora del destino de salida y de llegada, puedes adelantarte unos días a los cambios para adaptar tu organismo poco a poco a tu lugar de destino. Por ejemplo, si vas a viajar hacia el este, entonces, puedes irte a dormir antes. Por el contrario, en los viajes hacia el oeste es mejor hacer lo contrario, ir a dormir una hora más tarde.

2. Por otra parte, el descanso antes de un viaje es fundamental. De lo contrario, se suma malestar y falta de sueño. Por ello, intenta tener una vida muy ordenada los días previos a un viaje para respetar tus tiempos de alimentación y de descanso.

3. Toma el viaje con sentido del humor, incluso, en caso de que te dé miedo viajar. Ya que el optimismo es la mejor compañía para hacer un viaje largo.

4. Toma algunos consejos para poder mejorar tu descanso en el avión. Puedes comprarte un antifaz para los ojos y también, evita el consumo del alcohol. Toma una postura cómoda e intenta relajarte, cierra los ojos y desconecta del entorno. Imagina una situación bonita que te haga feliz.

5. Nada más llegar al lugar de destino, lo mejor es ir a dormir y descansar. Luego puedes levantarte en base al horario frecuente de ese destino.

6. En caso de tener mucho sueño en el lugar de destino puedes tomar algunas medidas prácticas como por ejemplo, realizar unas siestas cortas o también, tomar bebidas con cafeína, pero sin abusar.

7. Antes de un viaje es importante estar preparado para los efectos del yet lag. Por ello, infórmate previamente. En unos días, el trabajador ya se habrá adaptado a su nuevo lugar de destino.